VARIABLES CAÓTICAS. UNA CONTRIBUCIÓN TEÓRICA EN PROPUESTA PARA UNA PLATAFORMA ANARQUISTA INFORMAL.

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(Enviado al mail)

[Traducido por Sin Banderas Ni Fronteras]

1) La desobediencia es una virtud

«Estás obligadx a fingir que respetas a personas e instituciones que consideras irracionales. Vives por la moda en una época de cobardes, atadx a convenciones éticas y sociales que desprecias, que condenas y que sabes carecen de cualquier fondo. Es esta constante contradicción entre tus ideas y deseos y todas las formalidades muertas (…) de una cultura que te entristece, te desorienta y desequilibra. En esta lucha insoportable se pierde cada baile por la vida, se pierde todo el sentido de tu personalidad a cada momento en que te oprimen, a cada momento que limitan y controlan la libertad de tu fuerza. Este es un golpe venenoso y mortal causado por el mundo civilizado”. (Octave Mirbeau).

Llevamos mucho tiempo desde que nos hemos opuesto al mundo de la autoridad y sus innumerables proyecciones e imposiciones sobre nuestras vidas. Hemos pisado la línea con el mundo de la anarquía tratando de encontrar cómplices en el «crimen» de la insurrección anarquista, como una postura de vida de cara a la barbarie de los tiempos modernos.

Hasta ahora hemos tratado de realizar motines más pequeños y más grandes, siempre sobre los principios de auto-organización, de la anti-jerarquía y de estructuras horizontales. Buscando a través de procesos colectivos para lograr nuestra auto-educación personal con el fin de adquirir experiencias, familiarizarse con los procedimientos anarquistas mientras «hacemos nuestras» más y más formas de lucha, hemos llegado a conocernos unxs a otrxs sobre la base de objetivos y aspiraciones comunes a fin de continuar nomadeando por los senderos de la acción anarquista caminados -o no- hasta ahora.

Con esta cultura política como vehículo, armamos nuestras negaciones y decidimos pasar del impulso espontáneo a la acción organizada. Siempre nos hemos sentido parte de un frente anarquista multiforme que ha luchado contra la autoridad de varias maneras y nosotrxs, por nuestra parte, sentimos que hemos contribuido de esta manera a la guerra por la destrucción del poder y su civilización.

Enemigxs de toda discriminación estatal, social, religiosa, racial y de género,  enemigxs de una máquina autoritaria que aplasta a poblaciones enteras y mata a otrxs en la cárcel de la explotación. Una máquina que actúa violentamente contra la naturaleza y destruye la vida salvaje en el altar del desarrollo capitalista. Junto con tratar de atacar los tentáculos asesinos de la soberanía, también desaprobamos, a través de nuestras palabras, a la sociedad que la tolera y la reproduce en millones de formas.

Pero la historia comienza mucho antes …

Comenzando en la periferia del ámbito anarquista, desde nuestra primera participación en conflictos en manifestaciones, en Exarchia o en otro lugar, empezamos a sentir que lo espontáneo y lo no organizado ya no nos acomodaba. Así pasamos por lugares de reunión anarquista (estudiantiles o no) donde estuvimos más o menos involucradxs, hemos participado en asambleas generales, en ocupaciones estudiantiles, mientras que poco a poco llegamos a conocernos unxs a otrxs y creamos grupos callejeros organizados aplicando prácticas agresivas en el periodo 2006-2007 -durante las movilizaciones estudiantiles – mientras que otrxs ya se habían encontrado previamente a través de nuestra presencia en agrupaciones anarquistas en las escuelas.

Cada unx de nosotrxs estaba buscando un modo de organizarse y actuar, y es por eso que todxs buscamos nuestro camino a través de grupos pequeños o más grandes de compañeros que promovieron prácticas de acción directa. Nos movimos dentro de las asambleas de solidaridad con lxs presxs políticxs que promovían el valor de la acción multiforme, eligiendo -entre otras cosas- sobre una base consistente, incluir la dimensión de la solidaridad agresiva (por ejemplo, la Coordinación de Acción por lxs Combatientes Encarcelados).

Por nuestra necesidad individual y colectiva de promover la intensificación del ataque anarquista contra la autoridad a través de las colectividades organizadas de acción directa, todxs nos encontramos de nuevo en la Conspiración de Células del Fuego.

En diciembre de 2008 bajamos a las calles inundadas por la ira de lxs insurgentes buscando perdernos en la multitud con el fin de contribuir a la difusión de la violencia metropolitana. Después de esto, tratamos de enfocar la acción directa y la difusión de la nueva guerrilla urbana anarquista (que, como dice su semiología, reivindicó en un modo político la herramienta de la guerrilla como una práctica anarquista, lo que era algo realmente nuevo hasta ese momento).

Así que estas son nuestras raíces y nunca vamos a renunciar a ellas. Muchas veces, con el fin de ver cómo avanzar, tienes que mirar quién eras antes y desde dónde comenzaste. Así que para nosotrxs, la corriente anarquista (que ha llegado a ser descrita como un «espacio») con todo lo bueno y lo malo – en lo que en mayor o menor medida hemos contribuido-, es nuestra matriz. Dentro de los procesos de este «espacio» en que nos encontramos, hemos llegado a conocernos unxs a otrxs y llegamos hasta el hoy, y es por eso que no vemos ninguna necesidad de un autoexilio. Puesto que la corriente anarquista es un constructo sintético donde se mezclan muchas ideas y también prácticas, y puesto que el espacio no tiene longitud y latitud desde donde dividirse, fue innecesario para nosotrxs encontrar otro espacio. Además, se ha demostrado históricamente que no es ni productivo ni factible hacerlo. Este mosaico de muchas escuelas diferentes de teoría y prácticas que conforman el «espacio» anarquista promueve el desarrollo de la competencia política. Depende de todxs nosotrxs, sin embargo, asegurar la calidad de las características tal competición. En cualquier caso, el autoexilio no contribuye ni nos cubre personalmente.

Cualquier cosa que se pueda ver como elementos negativos en el llamado «espacio» es también la propia responsabilidad de cada unx de contribuir a eliminarla. La burocracia, el hegemonismo, las jerarquías informales, la intriga y las falsas amistades y falsxs «compañerxs» apuñalando por la espalda están ahí desde el tiempo que existen anarquistas, porque son elementos humanos de nuestras contradicciones que surgen constantemente en conflicto unas con otras. Todas estas patologías se deben a actitudes que no pertenecen a una tendencia anarquista en particular sino que a todas, y si no son tratadas como son, las vamos a encontrar frente a nosotrxs una y otra vez.

Esto no significa que tengamos que ceder y hacer concesiones para evitar cualquier confrontación. Además, como hemos escrito anteriormente, el «espacio» anarquista es al mismo tiempo un terreno de competición política en la que se cruzan diversas estrategias. Es una apuesta que, si no pueden estar de acuerdo, estas estrategias caminen sobre senderos paralelos sin estar necesariamente en conflicto directo entre sí. Tal evento será una condición de la maduración política mutua, lo que puede permitir a la anarquía escapar de su introversión y adquirir características más peligrosas para la autoridad. En cualquier caso, es recomendable tener en cuenta que cualquier crítica de los procedimientos anarquistas deben estar separados de lxs sujetxs que lo componen, así como el valor de un proyecto político o intento, pueden ser diferentes de aquellxs que participan en ella, de lo contrario la crítica de una okupa, por ejemplo, podría ser tan estéril como una crítica hacia una organización de lucha armada cuando todo lo que se esconde detrás de esto son emociones personales. Porque la gente va y viene, pero el valor de los proyectos no conoce temporalidad.

2) El derecho le pertenece a lxs insurgentes …

«La indiferencia es falta de voluntad, es parasitismo, es cobardía, no es vida. Es por eso que odio a lxs indiferentes. La indiferencia es el peso muerto de la historia. Actúa pasiva pero es activa. Es el fatalismo. Es lo que no se puede calcular. Es lo que molesta a los programas, y hace caer los planes hechos de la mejor manera posible. Es la materia bruta que ahoga la inteligencia. Lo que sucede, el mal que cae sobre todxs, se debe a la masa de gente que renuncia a su voluntad y que permite que se promulguen las leyes que sólo la revuelta podrá suprimir. [La masa] permite el ascenso al poder de personas a las que sólo un motín podría derribar «.

Antonio Gramsi

No nos oponemos al concepto de organización, y si esto sorprende a algunas personas entonces dejamos claro que nuestro objetivo no era, ni es, que ésta se convierta en un individualista club literario y filosóficas de intelectuales y artistas que pasan su tiempo auto-admirando sus singularidades y alabando su ego.

Nuestra concepción del individualismo no viene de la creencia de que somos una vanguardia nihilista, sino que tiene claros orígenes anarquistas. En primer lugar somos anarquistas. Nuestra diferencia con otrxs anarquistas, entre otras, es que creemos que la acción anarquista se debe definir por sí misma, no por el consenso social, y que estamos en contra de todas las visiones políticas impuestas como «directriz» de una supuestamente ortodoxa línea política anarquista que cree que la única buena acción anarquista es la que goza de legitimidad social. Siempre hemos considerado -y todavía lo hacemos- tales puntos de vista como algo estrechos de mente, porque en realidad son actitudes políticas que entrampan la anarquía exclusivamente al contexto de una presencia pública- bajo ciertas condiciones por supuesto-, ya que con el fin de ser gustar a la gente se torna auto- castrada, suaviza las puntas de su carácter radical y las vértices más agresivas de sus palabras para terminar siendo no tan diferente de las palabras de otros entornos políticos (por lo general de algún partido político) que también por razones de entrismo ocultan su identidad política, usando la misma táctica en los hechos. No hace falta decir quiénes son los ganadores en este juego de políticos. Además, creemos que el compromiso revolucionario de todxs y cada unx es ante todo una cuestión muy personal que cubre las conciencias de cada unx con las propias necesidades existenciales y políticas, y no un deber que tiene que ser llevado a cabo fatalmente porque se impone por alguna clase u otro rol social.

Esta diferencia muy importante nuestra con otrxs anarquistas ha hecho que sea más fácil para nosotrxs enfocarnos en las decisiones individuales. Así, el proceso de delimitación de las funciones de la máquina social y la condiciones registradas como la apatía y la indiferencia hacia los continuos crímenes del poder impuestos en cualquier forma posible en todos los rincones del mundo, también ha formado una gran parte de nuestro análisis sobre la sociedad y, por tanto, una gran parte de nuestra estrategia.

Nos hemos librado de los síndromes de culpabilidad como «¿por qué la gente no viene con nosotrxs?» O «¿por qué nuestras propuestas no son comprendidas?» No vivimos en una era donde textos expresando ideas subversivas y revolucionarias se manden al fuego junto a sus autores. En las sociedades modernas, el acceso a las ideas libertarias y subversivas es libre. Hay libros, revistas, ensayos, análisis, historiografías, biografías y todos ellos libremente se pueden encontrar en las librerías o haciendo clic en un botón del computador. Por lo tanto, debemos admitir, lejos de cualquier tipo de obsesión, que no es que las personas no conozcan o no entiendan nuestras ideas y propuestas, sino que sí las conocen (o pueden aprenderlas con facilidad) y simplemente las ignoran por múltiples y diversas razones o, teniendo ya malas intenciones, consideran que son hostiles.

Así que la forma en que actuaremos y lo que diremos no puede estar determinado por nuestra estimación sobre la opinión de una sociedad -en cualquier manera- indiferente . Además, creemos que la reacción contra la desigualdad, la violencia y la represión producida por la autoridad no se deriva de la investigación académica ni de una sólida formación en diversas ideologías y programas, sino que de la más profunda sensibilidad de cada persona que no puede reconciliarse con la idea de injusticia que existe en todo lo que nos rodea.

Esta sensibilidad más profunda como un instinto humano no hace de lxs insurgentes entidades superiores, sino personas que quieren levantarse y atacar a cualquier forma de autoridad. Por otro lado, están aquellxs que están acostumbradxs a no tener preguntas, a no estar interesadxs, cerrando sus ojos y oídos cuando las circunstancias lo requieran, y terminan discutiendo con todxs aquellxs que perturban el orden y la falsa paz de su sociedad indiferente.

En nuestros tiempos, sin embargo, la violencia quirúrgicamente calculada sobre la que está construido el edificio de la soberanía ya no puede ser ocultada. Con la explosión de la era tecnológica y el desarrollo de la industria del espectáculo, estamos siendo bombardeadxs diariamente con estímulos audiovisuales de los crímenes más graves de poder. No es sólo lo que está sucediendo en nuestro patio trasero, sino también todos los grandes eventos que tienen lugar a nuestro alrededor. Vemos el bombardeo de las cruzadas modernas erigidas sobre las pilas de miles de muertxs como el nuevo status quo de la prosperidad occidental, mientras que al mismo tiempo estamos familiarizadxs con escenas de tortura y asesinato de una nación Islamo-fascista que fue criada, entrenada y equipada por el propio Occidente para servir a sus propios intereses estratégicos y geopolíticos. Al otro lado, vemos la extrema derecha ganando terreno en toda Europa, desde que el estallido de la cuestión de lxs refugiadxs y de la migración hace que los líderes de los partidos neonazis sean en todas partes cada vez más populares. Toda Europa está blindada, creando un continente con muros de hierro en las fronteras de donde miles de personas han sido sacrificadas en los últimos años, entre ellas muchxs niñxs. La seguridad de cada europex está teñida con la sangre de lxs desesperadxs.

Por tanto, creemos que sería preferible para lxs anarquistas, a través de nuestra acción y de nuestras las palabras, tratar de hablar en primer lugar a lxs pocxs que se sienten en revuelta contra la fealdad de este mundo.

No es necesario usar ningún anteojera ideológica para entender esta fealdad. Es por eso que no buscamos acercarnos a lxs indiferentes, a lxs apáticxs, a lxs neutrales, ni adaptar nuestras palabras para caer bien. Porque hoy más que nunca, la neutralidad no es sólo un lujo sino que una provocativa y consciente indiferencia en relación a las miles de formas de opresión del poder y, por lo tanto, es complicidad.

3) Quienes no se arman, mueren en sus convenciones.

“La guerra social hará imprescindible la necesidad de una organización, que será el progreso esencial del movimiento real. El antagonismo constante de minorías activas es el sendero del ataque a las estructuras de soberanía y de todo quien la sostiene, aquí y ahora, el ataque pondrá de relieve lo vulnerable que es el enemigo y permitirá que nuestrxs compañerxs que se encuentran rehenes del estado sepan que no están solxs y que lxs apoyamos con nuestra solidaridad.”

Gustavo Rodríguez

Cualquier crítica que no se corresponda con alguna propuesta no es ni motivante ni realmente antagónica. Es bien sabido que el concepto de organización puede causar una reacción alérgica a lxs anarquistas porque se identifica generalmente con formas arterioscleróticas similares a estructuras autoritarias (lo cual es cierto incluso en un pequeño grado) y es lógico tener esta fuerte reacción especialmente cuando una número suficiente de anarquistas impulsadxs fanáticamente  por el estructuralismo desarrollan estructuras de ese tipo. Pero ¿cuál es el significado de una crítica que no pretende superar prácticamente los problemas que encontramos en este tipo de estructuras?

En primer lugar, es importante empezar sobre terrenos comunes: Cualquier cosa que se desvíe del contexto de completo oportunismo y espontaneidad tiende a ser una forma de organización, ya sea en los casos de los grupos políticos con características de grupo de afinidad, ya sea un colectivo, una concentración, un grupo de acción directa. Si lo pensamos bien, lo que importa es la característica política y cualitativa de la organización. La necesidad de la organización se produce desde el deseo de llevar a cabo la colaboración entre unxs y otrxs con el objetivo de unir sus negaciones de la manera en que crean sea mejor.

El hecho de que seamos anarquistas individualistas no quiere decir que no tenemos perspectivas y objetivos en nuestro accionar. Esa es una visión errónea que nos suele atribuir por parte de quienes quieren socavarnos. Abrazar estas opiniones por nosotrxs mismxs sólo a causa de la reactividad a esta crítica no nos permite evolucionar. Nosotrxs, personalmente, queremos contribuir a un accionar anarquista que constantemente intente lograr algunos objetivos:

1. La provocación de circunstancias y condiciones potentes (debido a su intensidad, dinámica y naturaleza) para interrumpir el flujo de funcionamiento del poder. Deseamos incriminar a la neutralidad social y crear constantemente una condición polarizada que obligará a todxs a tomar partido y abordar el dilema: ser cómplice de la autoridad o estar con la rebelión. No hay soluciones de punto medio, no hay estados intermedios. La neutralidad debe morir porque estamos en guerra.

2. Nuestra intervención en el espacio-tiempo social de una manera que puede causar pequeños o más grandes cortocircuitos sociales. Con cualquier tipo de acción imaginativa queremos contribuir a la parálisis social y la desestabilización porque estas oportunidades constituyen grietas en la sociedad, y ya sea tengan duraciones más pequeñas o más grandes, sentarán las bases de un camino abierto a la radicalización, la cual se expande a través de la experiencia generalizada con caótica multiformidad.

3. La agudización de la guerra global anarquista contra la autoridad. Queremos intensificar la lucha constante contra el poder utilizando todas las herramientas de lucha atribuir ningún tipo de superioridad a unas sobre otras. Sería bueno evitar la persistencia de la especialización, que es una consecuencia de la adhesión, incluso inconsciente, a herramientas específicas de lucha, pero, por otro lado y sin embargo, no debemos dudar en intervenir cada vez más dinámicamente en tantos campos como sea posible. Por otra parte, diferentes tipos de lucha no deben ser condenados pues es algo inaceptable. La experiencia del conflicto puede conducir eventualmente a despertar la conciencia, superando nuestros miedos y debilidades. De esta manera podemos estar segurxs de nosotrxs mismxs, podemos fortalecer más y más nuestro deseo de luchar y nos damos cuenta de que podemos confiar en nuestra fuerza. El conflicto abre el camino.

4. Nuestra coherencia se encontrará con otros grupos de afinidad política, independientemente de la forma de acción que les representa de mejor manera, luego de la disposición común para una coordinación informal de su lucha. Esta coherencia puede resultar en una mejora automática de los objetivos citados, ya que la posible propagación más amplia de la acción anarquista puede alcanzar estas metas o incluso superarlas, instalando apuestas más grandes cada vez. Por otra parte, la secuencia de objetivos a conseguir tiene que ser fluida, de modo de evitar aspiraciones maximalistas que puedan dar lugar a la decepción de algunxs cuando no se cumplen los objetivos. Porque no importa cuán enamoradxs estemos con la idea de la destrucción final del mundo de la autoridad, sabemos que este objetivo podría ser tan lejano que es posible que nunca los experimentemos. Para nosotrxs, la aventura de la rebelión en sí misma, la insurrección perpetua, es lo que más importa. Vivir y cumplir todos los días nuestras negaciones aquí y ahora. Es por ello que queremos establecer apuestas abiertas con condiciones cualitativas siempre modificables. De esta manera nos aseguramos una flexibilidad duradera de la acción anarquista, lo que evita el estancamiento y la inactividad. Naturalmente, una crítica hacia nuestras objetivos es aceptable, pero no debe basarse en normas imaginarias que ni siquiera nosotrxs hemos colocado. Seguro que es mejor acercarse a nuestras metas aunque sea un poco, antes que no hacerlo en absoluto. Así, las críticas basadas en la cantidad de cajeros automáticos incendiados no contribuyen a nada, y sólo pueden ser escuchadas como el eco de una queja distante. En esta coherencia tenemos que dejar claro que algunas formas de acción no están para dar resultados en otras. Cada colectividad de la lucha anarquista, ya sea pública o conspiracional, ya sea en okupas, ataques incendiarios o llevando a cabo ataques armados y ataques con bombas, es parte de un mosaico de acciones polimorfas donde cada método complementa y apoya a los otros sin grados jerárquicos. Todas juntas representan una coordinación informal internacional contra la autoridad. No creemos que las diferencias teóricas puedan ser un obstáculo para esta consistencia. Reconocemos que entre lxs anarquistas con diferentes creencias teóricas hay personas que sirven a sus ideas con coherencia y, a pesar de nuestras diferencias, eso es algo respetable. Así que, mientras nuestras palabras y acciones no sean tratadas de una manera hostil, no tenemos la intención de tratar a otras percepciones con hostilidad tampoco. Esto a excepción de aquellxs que con un signo ideológico y político permanecen contrarixs a la multiformidad porque poseen un reiterado y permanente desacuerdo con las formas ilegales de lucha. Su polémica a veces abiertamente y otras veces de manera encubierta (disfrazado de una crítica sobre resultados, objetivos, estrategia, el méritos éticos -o no- de los objetivos) es una forma estéril de no violencia que legaliza un pacifismo idealizado, un concepto ajeno a la anarquía (al menos en la forma en que nosotrxs vemos la anarquía), y no se corresponde con un mínimo de nuestros valores. Es un concepto con raíces cristianas influenciado por un liberalismo radical que reproduce incluso en parte la ideología dominante y esconde su miedo detrás de él. Fuimos y seremos opuestos a esta tendencia de la anarquía que tiene la tradición histórica de calumniar y condenar las prácticas de acción directa así como a lxs anarquistas que las utilizan. Y debido a que la memoria no es basura, no nos olvidamos de los libelos de condena (que podrían ser fácilmente envidiados incluso por los periódicos de la ciudad) que siguieron a la ejecución de los dos fascistas de Amanecer Dorado realizada por la Organización Revolucionaria – Fuerzas Revolucionarias del Pueblo Militante. Hubiera sido mejor para los libelos aforísticos que esa acción hubiera sido realizada por individualistas o nihilistas, pero a pesar de sus esfuerzos por ocultarlo, su verdadero problema no es con el contexto ideológico de la acción, sino las prácticas de violencia armada en sí.

5. La internacionalización de la acción anarquista en la misma base explicada anteriormente. Queremos promover la idea de una coordinación anarquista internacional polimórfica. Una Internacional Negra que tiene que ver con la acción (está el ejemplo vivo de la FAI / FRI y nosotrxs somos una parte de ella), pero también con la propagación de las ideas anarquistas subversivas por grupos conectados en redes informales que llevarán adelante el conflicto anarquista en cada parte de la mundo.

6. El recuerdo de nuestrxs muertxs a través de la acción anarquista en sí misma, para no dejar que desaparezcan en el olvido. Es cierto lo que dicen sobre que la lucha contra el olvido es una lucha contra la autoridad, por lo tanto, tratar de sentir cerca de nosotrxs a lxs compañerxs que hemos perdido es parte de la lucha que dejaron sin terminar. Por eso es importante recordarlxs apropaidamente y no de un modo más conmovedor para lxs pequeño-burgueses que mueren por drama y victimización.

7. La conexión con nuestrxs hermanos y hermanas encarceladxs de todo el mundo, desde las celdas de Korydallos hasta la cárcel de alta seguridad en Santiago de Chile. Es un hecho que lxs compañerxs en cautiverio han perdido la ventaja de la fermentación política con los demás con el fin de colaborar y promover con las palabras y las acciones la destrucción de lo existente. Ellxs mismos han declarado muchas veces que no van a comprometerse con su exilio de la acción anarquista, que no aceptan que el juego haya terminado para ellxs y se niegan a internalizar la represión buscando formas de conectarse con la lucha contra la autoridad que se da fuera de los muros. Es por eso que está en nuestras manos hacer posible esta conexión.

4) Diciembre Negro – Balance y perspectivas

Al igual que en el marco de la estrategia que se ha explicado arriba, los compañeros Nikos Romanos y Panagiotis Argyrou realizaron un llamado para un mes de acción coordinada proponiendo como tema una campaña de memoria por el asesinado anarquista Alexandros Grigoropoulos. Al mismo tiempo, Diciembre Negro fue el primer intento de probar los objetivos y las estrategias descritas anteriormente. Sin embargo, ¿en qué medida creemos que se alcanzaron estos objetivos?.

a) Diciembre Negro, principalmente a través de la proyección negativa que causó (por los medios de comunicación), ha contribuido a la creación de -aunque sea en un grado pequeño- una situación de división para un sector de la población.

b) Algunxs compañerxs participaron y contribuyeron a los enfrentamientos de los días 4, 5 y 6 de diciembre en Exarchia y otras ciudades, mientras que muchas actividades de acción directa se llevaron a cabo en el marco del Diciembre Negro.

c) Hubo una amplia difusión de los medios de conflicto (siempre en comparación con lo que estaba ocurriendo en los últimos años, donde la verdad es que había un estancamiento, sino una regresión, en esta parte) en tanto muchos proyectos de acción directa han tomado en diferentes lugar en ciudades de las provincias (Rethymno, Heraklion, Komotini, Volos, Larissa, Tesalónica, Mitilene) mientras que los núcleos de la Federación Anarquista Informal (FAI) apoyaron el llamado con ataques en Atenas, Komotini y Larissa.

d) Vimos una consistencia de grupos de afinidad políticos que excedieron las preconcepciones teóricas, ya que procedían de diferentes tendencias de la anarquía, que en lugar de centrarse en sus diferencias con mutuas acusaciones, se las arreglaron para contribuir a las acciones que ponían de relieve la riqueza de la multiformidad anarquista, lo que demuestra en la práctica que la actividad anarquista pública puede ser perfectamente compatible con la ilegal. Por supuesto, hay quienes consideran esto como un legado negativo, ya que más bien prefieren las preconcepciones teóricas estériles que impiden unir acciones y consistencia. No podemos explicar de otra manera el hecho de una valoración pública negativa al Diciembre Negro que proviene de un espacio anarquista y que valora como un inconveniente absoluto el hecho de que algunas personas decidieran averiguar más qué es lo que les une en lugar de lo que les divide. Si esta es la dialéctica a la que prefieren, entonces innovan en nada: esta dialéctica prevalece en el «espacio» anarquista durante décadas.

e) Hubo una gran respuesta internacional al llamado del Diciembre Negro desde el exterior, ya que desde Chile a Italia y desde los EE.UU. a Australia fue realmente desarrollado un polimorfismo de las acciones: sabotajes a tiendas de animales, ataques incendiarios en objetivos diversos, manifestaciones conflictivas en Holanda, Suiza y Chile, bloqueos de calles con barricadas de fuego en Perú, actividades en espacios de encuentro y okupaciones tanto en Grecia como en otros países, acciones de propaganda pública con pancartas, carteles, volantes, consignas, estencils, libros y publicaciones subversivas y todo tipo de sabotajes como la colocación de artefactos explosivos en Italia y México.

f) La verdad sobre nuestro compañero Alexandros Grigoropoulos, ha sido restaurada. Lo que realmente insultó su memoria fue poner el foco, incluso por parte de anarquistas, en su condición de «joven» e «inocente».

El fetichismo de la victimización puede encontrar otrxs muertxs para pasar su tiempo de ahora en adelante, como lxs otrxs recordarán a Alexandros por lo que fue en realidad: un joven anarquista rebelde que pagó con su vida por su elección de no cumplir con los dictados de un uniformado sirviente de la legalidad, que a su vez lo juzgó como culpable y lo ejecutó en el acto. Alexandros no murió durante algunas luchas sociales, como para conectarlo solo con ellas, sino que murió durante una acción insurreccional espontánea en Exarchia, una de esas que usualmente algunos/as calumnian con las peores palabras. Por otra parte, el 6 de diciembre de 2008 es una evidencia de que tales acciones no están siempre en el lado seguro (como a muchxs les gusta decir), ya que no fue ni la primera ni la última vez que un policía saca la pistola y dispara contra compañeros atacándoles dentro y fuera de Exarchia. El hecho de que Alexandros era quien era, no sirve a la agenda política de algunos y no es en absoluto casual que, si bien muchxs sabían quién era el compañero en realidad, todavía insistan después de siete años en conmemorarlo como un inocente estudiante de 15 años.

g) Y finalmente, estuvo la conexión de compañerxs dentro y fuera de los muros de la prisión, ya que tanto en Grecia como en el extranjero presxs anarquistas apoyaron el Diciembre Negro con textos públicos, mientras que en Grecia lxs presxs anarquistas pusieron algunas pancartas en el ala A y D de la prisión de Korydallos y hubo una convocatoria pública de una manifestación afuera de la prisión de Korydallos el 31 de diciembre.

Creemos que una de las cosas que ayudaron en la amplia difusión del Diciembre Negro fue que el llamado de los dos compañeros fue lo suficientemente abierto para que todos fueran capaces de darle forma. Además, la perspectiva de la acción multiforme, sin dar prioridad a uno medio por sobre el otro, creemos liberó aún más posibilidades que llegaron a ser entendidas. Por supuesto, los compañeros Nikos Romanos y Panagiotis Argyrou, junto con los otros miembros de la Conspiración del módulo A que acompañaron la propuesta, ya sea en teoría o en la práctica, habían declarado inicialmente que percibían el Diciembre Negro como un experimento, prácticamente un «piloto» para probar en la práctica las posibilidades de una plataforma informal de coordinación de la acción anarquista, sobre los principios de polimorfismo y autonomía política de los colectivos e individualidades.

Nosotrxs por nuestra parte estamos buscando una forma sustantiva de conectarnos con nuestrxs compañerxs en cautiverio, de una manera que vaya más allá de los conceptos hasta ahora estrechos de solidaridad y tratar de transformarlos en relaciones que se muevan en aquellos de colaboración entre compañerxs. Cuando esto es posible de alguna manera, entregamos esta contribución teórica que sustenta la propuesta del compañero Nikos Romanos.

Sabemos que los textos no son suficientes para reemplazar la belleza de la comunicación en vivo, pero por otro lado entendemos que la condición de encierro no permite muchas opciones más allá de la contribución por escrito de pensamientos, ideas y propuestas apelando a cualquier persona que crea que puede conseguir algo de ellxs. Tales propuestas no son ciertamente una especie de Biblia y, obviamente, no creemos que se trate de una técnica de atraer a «creyentes». Así, por nuestra parte vamos a apoyar y promover este tipo de propuestas teóricas procedentes de nuestrxs compañerxs presxs teniendo en cuenta que de esta manera suprimimos aunque sea de manera imaginaria los barrotes de la prisión que nos separan, mientras que por otra parte queremos desarrollar lo más posible una sana interacción con quienes  creen que podría haber un sendero común de compañerismo. Esa es la manera en que entendemos la importancia de la propuesta de una plataforma informal anarquista en sí.

Hemos notado por nuestra propia experiencia que no existen recetas y que la experimentación continua, el esfuerzo continuo para el desarrollo personal, la lucha contra nuestros propios pensamientos dogmáticos interiores, por los que estamos bastante abrumadxs de vez en cuando, son la manera de prácticamente probarnos a nosotrxs mismxs y nuestras ideas. Ideas que no deben ser petrificadas porque pierden sus dinámicas y sobre todo pierden la posibilidad de transformación. Es por eso que en nuestras sugerencias damos la bienvenida a aquellas críticas que contribuirán positivamente a cualquier desarrollo mejorador. Nuestra voluntad es la apertura de diálogos que promuevan el desarrollo de la guerra anarquista contra cualquier forma de autoridad creando una plataforma informal anarquista de teorías y prácticas sin que necesariamente la actualidad política y social borre nuestra autodeterminación. Una plataforma informal de acuerdos mínimos en constante movimiento, donde cada colectividad e individualidad preservará su autonomía política en su conjunto, así como fomentando la acción concertada como sea posible.

Finalmente enviamos nuestro más caluroso saludo a todxs lxs compañerxs de todo el mundo que dieron vida al experimento del Diciembre Negro.

Es ahora que todo empieza …

Con nuestrxs muertxs siempre presentes en nuestra memoria …

Por la Rebelión Anarquista permanente y la Coordinación Informal de la Acción Anarquista multiforme.

«Hasta que amanezca permaneceremos
con la cabeza en alto
y todo lo que podamos hacer
no dejaremos que otrxs lo hagan antes que nosotrxs»
Goethe

Nada menos que todo …

CCF- Célula de Violencia Metropolitana

PD: Hace unos días, el grupo anarquista de la ciudad de Volos «Saboteadorxs de al lado/ Memorias en Movimiento» se atribuyó el sabotaje de 52 cámaras de seguridad en muchas áreas de Volos, en el período comprendido entre principios de diciembre hasta mediados de enero (una acción inserta en el marco del Diciembre Negro) incorporando un llamado para accionar contra la sociedad de control y vigilancia. La iniciativa y las palabras de lxs compañeros que hicieron de esta llamada fortalecen en la práctica el experimento de coordinar la acción anarquista multiforme, por lo que no podemos dejar de expresar nuestro apoyo.

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Nota de Sin Banderas Ni Fronteras: este texto apareció originalmente en enero de 2016, a modo de balance y propuesta post- Diciembre Negro. Es también un complemento a la propuesta de coordinación informal planteada por el compañero Nikos Romanos, también en enero: https://vozcomoarma.noblogs.org/?p=11797

CHILE: ESCRITO DE LOS COMPAÑEROS FREDDY, MARCELO Y JUAN DESDE LA CÁRCEL DE ALTA SEGURIDAD

solidaridad

(Recibido al mail)

“Que las esquirlas de la Libertad de cada explosión lleguen a bombear el corazón de cada presx que enfrenta dignamente la cárcel en cada rincón del mundo”

Kevin Garrido

Cautivo de Guerra

Cárcel de Máxima Seguridad-Chile

Nada ha cambiado, seguimos en Lucha y en el transcurrir de estos 8 años de Resistencia y prisión, saludamos la convicción antiautoritaria, subversiva, libertaria y revolucionaria a todxs quienes han apañado de forma concreta no solo el proceso de prisión, comprendido este como una posibilidad real para quienes decidimos hacer de nuestras vidas un kaminar fecundo en la subversión y autonomía, combatiendo al Estado y todo su entramado sustentado en el capitalismo.

Decidimos y tomamos posiciòn en nuestras vidas, libres en la práctica directa desde la autonomía y la unidad fèrtil que nos permita seguir profundizando el continuo de una historia en lucha.

Presente que rescata un recorrido combativo en esta Guerra Social, donde cada gesto y axiòn mantiene lùcido en cada uno de nuestros corazones el latido ininterrumpido por un mundo libre.

Nuevas generaciones, fuerzas arrimadas a las urgencias y desafíos que van nutriendo cada paso con oxìgeno libertario este kaminar en guerra, les saludamos, sepan de nuestro abrazo, cuenten con la complicidad insurrecta. Mucha fuerza y decisiòn en el despliegue de vuestras capacidades. Hagamos de estos 8 años de resistencia y prisiòn una excusa màs para desatar una subversiòn ofensiva desde cualquier espacio o esquina, aunando experiencias y compartiendo certezas de vida libertaria.

Con la intenciòn irreductible de que la teorìa explose en axiòn combativa. Prácticas que nos aúnen, considerando que el combate al Estado-Capital es una construcción permanente, multiforme, sin pràcticas superiores o mejores. Todas apuntan y sostienen en su esencia, autonomìa dignidad, horizontalidad y decisiòn lùcida en la construcciòn de redes mùltiples de subversiòn ofensiva. Desde la confrontaciòn contra el Poder y la Autoridad afiancemos las prácticas revolucionarias.

Extendemos el cariño incondicional a nuestrxs hermanxs Mònica y Francisco, rehenes del Estado Español, que resisten ìntegrxs el encierro capitalista, ponemos la solidaridad activa, la axiòn antiautoritaria internacionalista, que no olvida ningunx compa en prisiòn.

Reafirmamos el saludo para todxs lxs que luchan en el marco de estos 8 años de resistencia y prisiòn.

Por la subversión autónoma y libertaria:

la lucha es el único camino.

Hasta destruir el último bastión de la sociedad karcelaria.

Mientras exista miseria habrà rebeliòn.

Marcelo Villaroel

Freddy Fuentevilla

Juan Aliste

Kàrcel de Alta Seguridad,  Stgo- Chile

Marzo 2016

CHILE: NI OLVIDO, NI SILENCIO NI IMPUNIDAD. POR LOS MUERTOS EN RECITAL DE DOOM…¡VENGANZA!

(Recibido al mail)

(Texto aparecido en publicación «Contra Toda Autoridad» #3)

“Venganza, venganza contra el opresor/ levanta el puño/ desata el horror /nuestra vendetta será su perdición /nuestra convicción es la destrucción de todo lo que nos destruye/ no nos detendremos / nunca nos quedaremos callados aunque nos maten o seamos fusilados.”
(Letras del proyecto musical “Na-Die”, del compañero Ignacio Medina, asesinado en recital de Doom)

En recuerdo de Ignacio Medina, Daniel Moraga, Gastón Anaglabeti y Fabián González…

La noche del 16 de abril de 2015 un concierto de música crust punk cambia de giro, apagando los acordes para dar paso al morbo de la carroña periodístico policial.

La banda Doom se presentaba en Chile en un concierto realizado por un conocido personaje del mundo OI Skin, mánager de una famosilla banda punk local (Fiskales Ad Hock), quien años atrás fue cercano y activo en la lucha por la salida a la kalle de los prisioneros políticos de la cárcel de Alta Seguridad. Claramente los senderos que pudieron unirnos hoy nos separan de forma drástica, en una muestra más de cómo nuestras elecciones de vida se van tensionando constantemente.

El antiguo punk anticarcelario, hoy convertido en empresario de la música, ligado a las mafias de las barras futboleras y a las drogas, realizó su espectáculo comercial/musical. Como custodios de la función estaba su permanente staff de matones ansiosos de encarnar prácticas policiales.

Al desatarse una avalancha deseosa de entrar gratis, la sed de ser autoridad fue desnudando lo peor de las personas que estaban en la organización del recital. Con bates y palos fueron golpeadxs quienes corrían escaleras abajo para alcanzar las puertas de acceso, luego fueron mojadxs y electrocutadxs con electroshock, produciéndose el desmayo y la parálisis casi como reacción en cadena.

Unx a unx fueron cayendo, aplastándose mientras recibían golpes de corriente conducidos por el agua. Unx a unx fueron desmayándose conocidxs/cercanxs y compañerxs algunxs, todxs devoradxs en la marea humana atrapada en una escalera electrificada.
Al final de la jornada, cuatro chicos murieron esa noche y uno más con el paso de los días. Cinco vidas que pudieron ser las de cualquiera de nuestrxs conocidxs/cercanxs o compañerxs, porque la muerte fue un azar en manos de los mafiosos de la organización de un concierto punk.

No escribimos estas letras pensando en los niveles de seguridad del recinto, en el “poco profesionalismo” de los guardias o en el descontrol propio del punk. Escribimos pensando en los chicos que encontraron la muerte en un incidente que evidencia al ciudadano-policía, deseoso de aplicar la violencia para defender y perpetuar tanto su rol de autoridad como sus intereses económicos.

Nuestras letras surgen desde la rabia, del instintivo impacto y también desde la alarma que nos produce que normalicemos lo ocurrido.

Para nosotrxs la música es una herramienta más de propagación de ideas, es un arma más de propaganda, así la entendemos y vivimos, lejos de las luces del espectáculo pirotécnico, del show comercial, de los dividendos y los empresarios que se sirven de ella.

Reivindicamos la autogestión,  no solo de nuestros encuentros musicales sino que de nuestras vidas, reivindicamos la defensa de nuestra contracultura anárquica, del “hazlo tú mismx” siempre con la finalidad de propagar un mensaje de confrontación a cualquier tipo autoridad.

Nos resultan despreciables quienes organizaron el recital de Doom, como también la miserable reacción de la banda, que en diferentes comunicados ha mostrado su apoyo al mánager chileno como si se tratara de un caído en desgracia. Entre empresarios siempre se cuidan la espalda. En un irónico acto, la banda comprometió recursos para las familias de quienes murieron, fondos que llegarían a las manos del mismo sujeto que organizó el recital.

No queremos la caridad ni lastimosa misericordia. No buscamos sanciones judiciales por este caso, porque no reconocemos jerarquías, ni la falsa justicia estatal ni su pretendida superioridad. Negamos desde la práctica la delegación de nuestros conflictos.

No olvidemos a los muertos en Doom, nuestra única justicia será la memoria negra y la activación de los actos en venganza.

¡Fuego a los/as empresarios/as de la música…Guerra al Poder y al ciudadano policía!

«Contra Toda Autoridad», publicación a-periódica por la insurrección permanente.

https://contratodaautoridad.wordpress.com

CHILE: SOBRE LA ACTUAL CONFLICTIVIDAD SOCIAL. CARTA DE HANS NIEMEYER POR EL DÍA DEL JOVEN COMBATIENTE

(Recibido al mail)

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Quisiera dar un saludo fraterno y combativo, lleno de energía a todos y todas quienes, más allá de las distintas visiones y diferencias ideológicas, reivindican la práctica y la memoria de la resistencia en una conmemoración más del Día del Joven Combatiente.

Este día, que nació para homenajear la vida y recordar el asesinato de los hermanos Vergara Toledo en 1985, fue tomando en el camino otras significaciones y enriqueciéndose con nuevos contenidos. Fue expandiéndose como una jornada de lucha propia de la juventud militante del rodriguismo, el mirismo, de lautarinos, cristianos de base y de todos los jóvenes que enfrentaron con las armas y las piedras en la mano a la dictadura de civiles y militares que refundaron el capitalismo chileno, sirviéndose del terrorismo de Estado y luego de una transición pactada con el objetivo de otorgarle legitimidad a los cambios estructurales que perduran hasta el día de hoy.

La falsificación histórica más burda ha venido de parte del discurso oficial de la clase política que pactó con Pinochet, diciendo que «a la dictadura se le derrotó con un lápiz» en el Plebiscito de 1988. La verdad sobre las fuerzas que estuvieron detrás esa salida política, operada por la poderosa alianza entre clase política, el Vaticano y Estados Unidos, es que fue para frustrar una salida insurreccional. Ciertamente, esa salida política pactada jamás fue una derrota de los militares.

Hace unos meses, durante una velada, el propio ex senador del Partido Socialista, Carlos Ominami Pascual, amenazó con dar a conocer las verdades de la transición y los entretelones sucios del Poder. En una entrevista, reconoció que la famosa y sacrosanta campaña del «No» fue financiada por Estados Unidos, quienes tenían clarísimo que la parafernalia plebiscitaria y electolera, en un ejercicio de gatopardismo, debía sacrificar al régimen para fortalecer el sistema. Y fue exactamente lo que sucedió, convirtiendo a Chile en el mejor alumno del continente y en el ejemplo de las políticas económico-sociales a seguir.

Fue contra este sistema y contra esa salida pactada que entregaron lo mejor de sí, incluso hasta sus vidas, los jóvenes que combatimos en las calles la dictadura de Pinochet en general, y los jóvenes de las organizaciones político-militares en particular y de la que son un buen ejemplo Eduardo y Rafael Vergara Toledo, Cecilia Magni Camino, Raúl Pellegrín Friedman, Claudio Paredes Tapia, Ronald Wood y tantos más, convirtiendo al Día del Joven Combatiente en una fecha propia de la juventud rebelde y de la subversión que intentaba atravesarse en el itinerario de poderosos y politicastros.

Hoy, sectores de la clase política creen que la gobernabilidad a largo plazo depende de la introducción de reformas que operen como válvula reguladora para evitar explosiones sociales y una conflictividad más generalizada. Otros, sin embargo, apuestan por la dureza y se aprestan a defender con uñas y dientes la obra de la transición, despreciando a los movimientos sociales y caracterizándolos como expresión de simples demandas por integrarse al sistema.

La vieja clase política de la transición pactada pretende retomar las riendas y la conducción. Un buen ejemplo son las palabras de Ricardo Lagos, espíritu y cuerpo del autoritarismo socialdemócrata, quien intenta una beatificación en vida por lo obrado y que se ofrece como garantía de gobernabilidad y orden, como expertos en el manejo del aparato del Estado al servicio de la clase dirigente a la que pretenden seguir rindiendo pleitesía y asegurando a Chile como uno de los países más injustos del mundo, donde el 10% más rico se adueña de la tercera parte del producto, donde la apatía, la amnesia, y la desmovilización les permitan seguir administrando el sistema pese a la gravísima crisis de legitimidad y la monumental imbricación del Estado-Capital, tal vez como en ninguna otra parte del mundo, donde el gerente de una empresa se permite dictarle las leyes a un senador. Con todo, la legitimidad del sistema de representación política y la distribución del ingreso siguen siendo las dos fisuras estructurales en el edificio de la dominación capitalista chilena.

Pero donde hay Poder, hay resistencia. Y por el lado de la oposición al dominio capitalista, se van adquiriendo distintas formas y la subversión resurge a través de otras expresiones, distintas a la subversión chilena existente entre los años 1978-1994. Así, en la post-dictadura el ecologismo, las reivindicaciones de los pueblos originarios —especialmente el mapuche—, las distintas expresiones anarquistas, los pobladores sin casa, deudores habitacionales, pescadores, comunidades en lucha contra empresas contaminantes o depredadoras de la naturaleza, minorías sexuales, estudiantes, trabajadores subcontratados, movimientos regionales contra el centralismo de Santiago y, en el futuro, los inmigrantes y sus hijos, son y serán expresión de un anticapitalismo difuso, sin dirección central, que ha sido el telón de fondo para nuevas generaciones rebeldes y para una nueva subversión que ha sido multiforme, pero también multifocal, donde la expresión anarquista ha estado presente, pero no tiene por qué ser la única. Esos son riesgos de la visión que reduce la nueva subversión a una «ofensiva ácrata».

En vez de eso, la nueva subversión tiene su mayor potencialidad en su dimensión autónoma, autoconvocante, en la pérdida de las referencialidades de vanguardia o dirección, en sus características dúctiles, móviles, ágiles. Más parecida a un pulsar, a una latencia; no a un movimiento que logre “interpretar” las distintas expresiones de la conflictividad social y del anticapitalismo difuso, sino que desde cualquier nodo en resistencia y antagonista a la dominación puedan y sean una materialización de una práctica subversiva dislocada, inabarcable e inasible. Esos han sido los derroteros que se han recorrido desde los noventa hasta ahora.

En este sentido, la dinámica y la práctica antagonista de la post-dictadura tiene a jóvenes que cayeron y que han ido ampliando la significación de la juventud combatiente. Claudia López Benaige, equivocadamente etiquetada como anarquista, militante de la Coordinadora Revolucionaria del Pedagógico (CRP) y activa solidaria con los presos políticos, que en una barricada de Avenida Grecia, en los noventa, sostiene un lienzo al viento con una consigna que luego se multiplicaría: Juventud combatiente, insurrección permanente. Claudia murió de un balazo disparado por carabineros el 11 de septiembre de 1998 en la Población La Pincoya. Varios más engrosaron la lista de los caídos luego de la muerte de Claudia, siendo una demostración en sí misma de las dinámicas de conflicto que han tenido lugar: Matías Catrileo Quezada, Álex Lemún Saavedra, Jonny Cariqueo Yáñez, Jaime Mendoza Collío, Rodrigo Cisternas Fernández, Daniel Menco Prieto (estudiante ariqueño muerto en 1999, un año después de Claudia), Mauricio Morales Duarte, Manuel Gutiérrez Reinoso, Sebastián Oversluij Seguel, Jorge Saldivia Espinoza y tantos más.

Quienes nos encontramos en prisión, varios más que hace unos años, también nos reconocemos y somos parte de ese nuevo torrente que obstinadamente dice que los caminos de la rebelión no están cerrados y que la dominación capitalista es un régimen nefasto contra el cual es necesario luchar.

¡Un homenaje a todos y todas nuestras caídas!

¡Juventud combatiente, insurrección permanente!

Hans Niemeyer Salinas

Cárcel de Alta Seguridad

27 de marzo de 2016

GRECIA: «SIN RASTROS DE REMORDIMIENTO». CARTA DE LA COMPAÑERA ANARQUISTA PRESA AGGELIKI SPYROPOULOU

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(Recibido al mail)

Caso escape de CCF: “Sin rastro de remordimiento” – Carta de la compañera anarquista presa Aggeliki Spyropoulou (Grecia)

[Traducido por Sin Banderas Ni Fronteras desde versión en inglés en 325nostate]*

«Sin rastro de remordimiento.»

Esta experiencia es el motor del desarrollo, tanto en el plano político como en lo personal. El encarcelamiento es una experiencia casi inevitable para cualquier persona que ha decidido unirse a la lucha armada. Pero la cuestión, al igual que en toda experiencia, es si tomar ventaja de esto y cómo hacerlo.

El nacimiento de la prisión siempre ha estado construido sobre el cultivo y la perpetuación de la validación de la sumisión de lxs que no se conforman con los estándares predefinidos de la sociedad. Sin embargo, hay algunas personas cuyo deseo de libertad les quema el corazón de una manera que no les permite aceptar el papel que se les impone como parte de la automatización de la prisión, ni siquiera por un solo momento durante su detención. Cuando se trata de estas personas, la prisión falla estrepitosamente en su propósito, y a pesar de los muros y barrotes que están a su alrededor encerrando sus cuerpos, ellxs mismxs siguen siendo rebeldes y realmente libres. Ni las almas, ni los espíritus encajan en las jaulas.

Vamos a empezar desde el principio. En primer lugar, como anarquistas que hemos declarado la guerra a todos los aspectos del mundo moderno civilizado, sabemos bien que con el fin de llegar a ser peligrosxs, es necesario el uso de todo tipo de medios. La propaganda armada fue, es y seguirá siendo una parte integral de la lucha anarquista diversa. La teoría es, sin duda, una herramienta muy útil, sin embargo, valida su significado real sólo cuando se refleja en la acción respectiva. Es esencial establecer una línea divisoria clara entre el enemigo y nosotrxs ya que liberarnos del sistema requiere de su rechazo práctico. La resistencia no puede detenerse donde comienza el código penal.

Desafortunadamente, la auto-seguridad y el miedo ideologizado, extendidos en la mayor parte de la comunidad anarquista más amplia, son el fundamento de la teoría política moderna. Esta charla incesante y la inofensiva retórica revolucionaria que defienden las puntas de lanza comunistas lleva gradualmente al alternativismo y el reformismo que sólo se las arregla para producir y reproducir una críticas de sofá que, por una parte, constantemente se aparta lejos de las ideas y los valores anarquistas, y por otro lado, es clara y completamente incapaz de contribuir al cultivar un terreno que promueva la evolución de cada uno de ellxs individual y colectivamente. Es realmente contradictorio y aun trágico que mientras la represión alcanza su punto máximo, simultáneamente observamos una pacificación de la comunidad anarquista oficial.

Ciertamente la situación actual no puede ser una excusa para nadie, ya que como individuxs que provenimos de las filas de esta comunidad, estamos frente a un dilema. O bien seguimos preservando el status quo, o elegimos a sobrepasarlo. Mientras las personas que entran en contacto con la anarquía no se reconozcan por sus acciones ni definan de forma activa y decisiva la forma en que quieren lograr sus objetivos, sino que se abandonen a sí mismxs en un sueño indudablemente conveniente, siempre serán sujetxs silenciosxs que conocen cuán grande y profunda es su falta de acción y, en consecuencia, su pensamiento será asimilado por el pensamiento de lxs que tienen más «experiencia» o reconocimiento. Este tipo de pensamiento no puede ser presentado como  subversivo si pretende mantener la jerarquía informal existente que todxs sabemos que está enquistada en la «comunidad».

Por otra parte, algo especialmente llamativo es la persistencia de la mayoría de lxs «anarquistas» por encontrar un «sujeto revolucionario». A menudo es la sociedad a la que se considera un «sujeto revolucionario». En otras palabras, una masa de gente incapaz de despertar de su sueño tranquilo con certezas fijas proporcionadas por la regularidad de la costumbre, la rutina y la auto-seguridad. En lo personal, me niego a permitir que los compromisos y la inmovilidad de las masas obstaculicen mi camino hacia la acción. Además, la estructura de la sociedad moderna que a través de sus instituciones, roles y valores dicta todo tipo de relación humana y regula cómo pensar y qué sentir elevando la mediocridad a la virtud más alta, envenena cada día, cada momento de mi existencia. La vida cotidiana está llena de movimientos mecánicos repetidos continuamente en un trasfondo aburrido, esperando en algún momento ser interrumpido  por la muerte y, a continuación, todo lo que queda es el vacío sin fin de lo incumplido. Esta es la forma en que la realidad se estructura y es tan rígida en su esencia que la hace completamente insoportable para mí.

En esta decisión de amenazar activa y directamente el status quo de esta realidad, también se incluye la liberación de lxs compañerxs presxs. La decisión de fugarse fortalece la elección eterna de no levantar una bandera blanca rindiéndose ante el enemigo, así como la limitación física impuesta por la prisión no es capaz de aminorar la intensidad de la pasión por la libertad ardiendo en el corazón de cada rebelde, ni es capaz de bloquear la deseo de continuar atacando a la autoridad y sus mecanismos, así como la masa servil cuya sumisión y falta de acción crea un tranquilo ambiente de uniformidad, legalidad y corrección política que acabó con cada individualidad y elimina la más mínima posibilidad de liberación de las cadenas que nos han impuesto.

Por lo tanto, qué muestra de solidaridad podría ser más sincera, efectiva y profunda con estxs compañerxs, que sin ningún remordimiento niegan la justicia del poder eligiendo recuperar su libertad para seguir luchando contra la autoridad, que compartir la culpa involucrada conspirando con ellxs ayudando a poner fin a su cautiverio.

Cada elección tiene sin duda su costo, especialmente cuando esta elección está dañando profundamente el prestigio del Estado, ya que pone bajo seria duda su fuerza aparentemente insuperable. Esta vez el estado, demostrando toda su furia vengativa, dio un paso más con la persecución, detención y encarcelamiento de familiares de los compañeros de Conspiración Christos y Gerasimos Tsakalos y Giogio Polydoros (Athena Tsakalou, Evi Statiri, Christos Polydoros), con los grotescos cargos de pertenencia y participación en la organización. Esta es una manera desesperada y en extremo desafiante para tratar de desmoralizar a quienes el estado reconoce como sus enemigxs internxs; lxs anarquistas de acción no arrepentidos que -en contra de todas las probabilidades y sin importar cuántos años añadan a sus condenas- no van a dejarán de atacar a la esencia de la democracia. Junto con esta mayor represión, la dominación tiene como objetivo la difusión del miedo con el fin de dejar claro que cualquier tipo de relación con lxs que se niegan a entregar sus armas se castiga duro, por lo tanto, tiene como objetivo el mayor aislamiento posible de lxs presxs políticxs.

Pero no importa lo mucho que crean que con tales prácticas nos harán renunciar a nuestros valores anarquistas o la acción directa, simplemente se engañan a sí mismos. Una vez más lo único que van a conseguir es nuestro desprecio absoluto y nuestra más poderosa rabia.

Por último, en cuanto a la farsa que se montará en la corte de la prisión de Korydalos, no tengo ningún deseo de hacerme pasar por víctima del sistema porque en primer lugar me siento honrada de haber participado en el intento de fuga de lxs compañerxs de CCF y aparte de eso, algo como eso significaría mi sometimiento psicológico ante la ley y el orden. La revisión de mi código penal es fríamente irrelevante para mí. Si tuviera que retroceder mil veces el tiempo, haría una y otra vez la misma opción de vida, ya que sólo respirando libremente puedo sentirme viva.

Aggeliki Spyropoulou
Cárcel de mujeres de Korydallos
14/02/2016
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*Nota: corresponde a versión completa y corregida de anterior traducción hecha desde el griego.

CHILE: COMUNICADO DEL COMPAÑERO JOAQUÍN GARCÍA

No es novedad que los medios de comunicación del dominio le sirvan precisamente a él, que el espectáculo mediático sea una parte esencial del control hegemónico y que se mantenga vigente justamente gracias a esto. Los medios varios constituyen la forma más sencilla y menos rigurosa del adoctrinamiento ciudadano, en oposición con los múltiples aparatos disciplinarios como la escuela, el trabajo y la cárcel. Éstos se entienden como un factor externo a la demanda de la maquinaria Estado/Capital, al menos materialmente, no responden a la urgencia de suplir una necesidad, ni son un castigo por la infracción a la norma, como es el caso de la cárcel. Su función es clara, fabricar un individuo con opiniones/ideas más o menos generales, productor y reproductor de consignas hegemónicas. Para conservar el status quo, la propaganda se disfraza de información objetiva.

No es de extrañar que apenas un enemigo del orden es expuesto al aparato mediático, ya sea por su captura, caída o posicionamiento político, se inicie una cruzada espectacular con el fin de reducirlo, banalizarlo, suprimirlo como entidad política, ridiculizar sus actos, sus decisiones y su identidad, crean historias fantásticas a su alrededor, y lo más importante, mostrarle al sometido/espectador las consecuencias de no responder a la norma. Vuelve el teatro como castigo.

Nada de lo que he escrito es algo nuevo, ni aun menos local. Fue una de las armas más importantes del poder para establecer un bloque ciudadano fabricado con delirios paranoicos en el “Caso Células”, donde encarcelaron a los compañeros de la Conspiración de Células del Fuego, o en el “Caso Bombas”, donde la ciudadanía demandaba a viva voz el encarcelamiento de los “terroristas”. Aun sabiendo que nada de esto es nuevo y que no responde más que a una estrategia del poder, es que decepciona que los “compañeros”, sujetos con supuesta consciencia político-revolucionaria, absorban la información de la prensa amarilla para formarse una opinión plástica de otro, influyendo (obviamente) en la relación (o no) que se crea con el mismo.

Es imposible –y poco práctico- que todos los revolucionarios se conozcan, pero que el espectáculo defina nuestras discusiones y relaciones es degradante e hipócrita.

Tampoco apetece el amiguismo generalizado –otra plasticidad-, pero si gritamos a los cuatro vientos que somos enemigos del poder, de la masa, de su doctrina y de su norma, es que nuestra conciencia y acción revolucionarias deben estar acompañadas de una crítica aguda constante.

En cuanto a la opinión pública, escupo en los comentarios del ciudadano enajenado.

Cuatro meses han pasado de mi detención y encierro, el final no se ve cercano, se dibuja un extenso camino por recorrer y se acercan tiempos decisivos, pero a pesar de las incertidumbres y de la evidente represión material, existe una premisa que no se sofoca ni muere: acá no se acaba nada.

Estos pocos meses han estado cargados de experiencias y aprendizajes, cosas que sólo en la individualidad cobran sentido, pero que no dejan de responder a parámetros coyunturales y muchas veces más colectivos de lo que creemos. Es por esto último que conocer las experiencias de los demás nos ayuda a dibujar un plano de posibilidades y opciones. En lo personal, nunca he sido un ávido lector de comunicados, cartas o autobiografías, no sé si no les di una oportunidad o netamente no enganchaba con lo que leía. Ahora la cosa ha cambiado, es una mierda que estando acá recién les tome la importancia y cariño que se merecen: las cartas, comunicados y autobiografías nos acercan en la adversidad, aparece el cordón de oro invisible y bajan al revolucionario del pedestal que muchas veces se construye, lo humanizan, nos hacen entenderlo como un cómplice y no como alguien ajeno a nuestra condición; vemos reflejadas nuestras propias contradicciones. Lejos de toda iluminación a posteriori, leer a compañeros plantear y responder a inquietudes compartidas, aun sin conocerlos en profundidad, afianza todavía más la complicidad y solidaridad informal e internacional. La teoría evoluciona lentamente, pero el empirismo es una fuente de evolución, crítica y contradicción constantes.

No se debe entender esto como un llamado –de hecho, de llamado no tiene nada- al romanticismo ni al fetiche, lejos de nosotros deben quedar los mártires, los héroes y los “grandes revolucionarios”. Desprecio los modelos a seguir y las identificaciones. Las experiencias de los otros tienen un fin práctico, ajeno al utilitarismo.

El 19 de noviembre, aproximadamente a las 7:00 am, desperté al ensordecedor descuadre de la puerta de entrada y al grito de “policía”. No alcanzaron a pasar muchos segundos para que un paco del GOPE me esposara y me llevara cerca de la puerta, aunque no sin antes decirme la razón: “estas detenido por colocación de artefacto explosivo”, seguido de una poco interesante lectura de derechos. Quiero dejar en claro que el hecho del que se me acusa es de la colocación de una bomba en la 12º comisaria de San Miguel, y no en la Escuela de Gendarmería. La razón por la que aclaro esto no es un “descarte” político, sino que, más bien, es para que se tenga una mejor noción de mi caso.

Aunque la imposición de la fuerza y el control sobre el cuerpo son parte esencial en la detención, la efectividad del trabajo policiaco deriva de la instrumentalización de su ambiente; la incertidumbre, la tensión y el quiebre de lo cotidiano son elementos que potencian. No fue casualidad, ni aun menos un acto humanitario que, mientras ellos hacían un rastreo inicial por mi casa, fuese exhibido constantemente a mi familia.

El orgullo y convicción de posicionarnos como entidades revolucionarias forja en nosotros una dignidad inquebrantable y que no flaquea, no son elementos que se desempolven para ser utilizados como armas, formar parte de una praxis constante en nuestro actuar. Ahora ,no existe un manual del comportamiento revolucionario ,ni una imagen a la que a la que responder, la apología al combatiente viril e inmutable cae en idealizaciones despreciablemente románticas, cada uno debería actuar conforme a lo que piense coherentemente y sus propias concepciones de lo práctico. Declararse revolucionario/antiautoritario implica ser una entidad autónoma capaz de dar pasos por sí misma y que no se mire por características definidas ni discursos aprendidos. Así como la dominación no es solo física/material, la individualidad y la negación de la autoridad no son solo estructurales, son una praxis constante en nuestras relaciones, decisiones y mentalidad.

Estuve sentado un largo rato en el piso de  mi casa ,observando el desfile de overoles blancos, las fotografías y la caza de elementos “sospechosos” del LABOCAR, quienes respondían a las recomendaciones de Raúl Guzmán (fiscal jefe en la fiscalía metropolitana sur). No había mucho que hacer más que observar la situación y terminar de despertarme.

Apareció el jefe a cargo de la operación con una sonrisa burlesca y arrogante, me comento: “el Kevin exploto”. No le creí, la verdad ni lo mire, era un comentario/táctica sabia más que recurrente aunque no por eso no sentí rabia e ira. No sé si hablar de indignación, en él nada me sorprendió, pero el descaro en su instrumentalización era desagradable. Esta más que clara su moral artificial.

Solo pude ver el tamaño del operativo cuando me trasladaron a la 14º comisaria de San Bernardo, pequeño comparado con otros pero ridículamente ostentoso.

Ya en la comisaria, y a pesar del aislamiento pude ver a mi compañero/hermano Kevin con una sonrisa tranquilizante, en pocas palabras supe que todo estaba “bien”.

El resto, aunque importante para mí, no vale la pena comentar.

(Edición de la tan manoseada agresión a Corbalán: No hizo falta que escribiera ni una palabra para que cada medio contrainformativo u “oficial”, contara/inventara su propia historia del hecho. No fue tanto,  ni tan poco como muchos decían, lo único real es el castigo: 30 días sin visita. Ahora que los románticos se hagan cargo de sus decepciones. De la prensa, ya lo comente, exposición como castigo y el eterno intento de reducción. De la carta del bastardo, nada que me interese, no contribuiré al cahuín y, ya saben, “al fascismo no se le conversa…”)

Un saludo fraterno a todos los que aun detrás de los muros permanecen irreductibles. A Nataly Casanova, Enrique Guzmán, Juan Flores, Marcelo Villarroel, Fredy Fuentevilla, Juan Aliste, Hans Niemeyer, Tamara Sol, Ignacio Muñoz, Nicolás Rojas, Kevin Garrido, Natalia Collao y Javier Pino.

A los que resisten al otro lado del mar; Mónica Caballero, Francisco Solar, Gabriel Pombo da Silva, Claudio Lavazza.

A todos aquellos que forjan su complicidad en ataque, con sus actos –cualquiera sean- sacuden la monotonía y nos hacen sentir en compañía.

A tantos presos “comunes”…

Joaquín García

C.A.S – S.M.S

Delirio entre febrero y marzo del 2016

CHILE: POR UN 29 DE MARZO INSURRECTO Y ANÁRQUICO

(Recibido al mail)

El 29 de marzo como Día del Joven Combatiente tiene su origen en los ejercicios de memoria combativa a partir del asesinato de los hermanos Rafael y Eduardo Vergara Toledo en 1985 durante la dictadura cívico-militar culminada en 1990 con una salida pactada.

El recuerdo combativo y revolucionario se proyectó luego en el contexto de la dominación democrática y se esparció hasta el día de hoy conectando a nuevas generaciones de rebeldes autónomos, anárquicxs y horizontales.

Concientes de la importancia de esta fecha, pero también de lo importante de agitar más allá del calendario y de la edad que tengamos, compartimos el siguiente texto -con algunas ediciones- difundido hace ya cuatro años y que consideramos tiene plena vigencia hasta el día de hoy.

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Ante un nuevo “Día del Joven del Combatiente”,

Que la insurrección y la anarquía salgan a las calles.

…Ante un nuevo Día del Joven Combatiente (29 de Marzo), queremos compartir con lxs compañerxs unas cuantas reflexiones sobre algunos desafíos que afrontamos en nuestra participación activa como agitadorxs de la anarquía en un contexto donde no somos la única corriente que agita las aguas del océano de la dominación…

1) El desafío permanente de recordar.

Aunque el ritmo vertiginoso de la dominación arrastra a lxs individuxs a vivir en un eterno presente de consumo, obediencia y enajenación, nosotrxs tenemos la necesidad permanente de recordar y hacer memoria para la acción, recordar para el presente y para el combate cotidiano. Porque enriquecer nuestras experiencias actuales con las experiencias del pasado es algo fundamental para situar nuestro accionar dentro de una ruptura continua con el mundo de la autoridad, a pesar de los golpes represivos y de los diferentes contextos de lucha, porque el enemigo se esfuerza por aislar y silenciar estas experiencias para que nuevxs compañerxs empiecen de cero una y otra vez.

Es necesario recordar a los hermanos Vergara Toledo, a Ariel Antonioletti, a la compañera Claudia López, al hermano Mauricio Morales y otrxs compañerxs caídxs en combate. Pero también es importante conocer y analizar sus contextos históricos, sus experiencias particulares y las dinámicas de lucha de cada momento para no caer en las trampas de la idealización ni el pantano de las ideologías. Conocer otras experiencias de subversión, valorarlas y criticarlas con fraternidad para afilar nuestras posiciones y prácticas actuales de lucha es algo que siempre han temido lxs poderosxs. Y eso es la memoria combativa…

2) El desafío de marcar la diferencia

¿Queremos aportar en radicalizar el conflicto contra la autoridad o nos contentaremos solo con movernos dentro del contexto de movilizaciones pauteadas por otrxs?

Tanto en las movilizaciones recientes como en fechas como el 29 de Marzo o el 11 de Septiembre las calles se inundan de distintas voluntades que suelen parecer uniformes a partir de prácticas comunes que les unen en la acción. Por un lado está la masa ciudadana, sus procesiones y demandas al Estado opresor, y por otro, la diversidad de individuxs que se hacen partícipes de la lucha callejera. Dejando de lado a la masa ciudadana, nos interesa hacer notar la necesidad de que la propaganda anárquica/antiautoritaria esté presente en las calles para diferenciarnos de otrxs discursos y propuestas que desde otras perspectivas se hacen presente en la radicalización de la protesta social.

De partida, hay que dejar en claro que no compartimos objetivos con quienes ven la lucha callejera y el enfrentamiento con la policía como una simple forma de diversión tan embriagante y fugaz como una droga. Para nosotrxs, la necesidad de desbordar y aniquilar los límites impuestos por el enemigo en todos los planos de la vida -incluida la protesta- es un acto de consecuencia con nuestra postura antiautoritaria e intentamos llevar estos planteamientos a cada una de nuestras acciones, incluso en aquellas que para algunxs parecen pequeñas o insignificantes como nuestra alimentación y nuestras relaciones entre amigxs y compañerxs… Por eso nos negamos a reivindicarnos como parte del lumpen, donde proliferan conductas consumistas, machistas y autoritarias.

También nos parece necesario marcar la diferencia con las organizaciones marxistas leninistas y toda la gama de colectivos satélites de dichas orgánicas que escondiéndose con discursos de asambleísmo y horizontalidad alimentan las filas de las estructuras jerárquicas de la ultraizquierda deseosa de Poder. Decimos esto porque nuestras proyecciones son completamente distintas a las del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), a las del Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR) y las del Movimiento Juvenil Lautaro (MJL). Estos partidos leninistas aspiran a destruir al capitalismo y a ciertas formas de gobierno, pero nunca han estado interesados en destruir la autoridad y toda forma de dominación. Al contrario, en su forma de organizarse y en su propuesta de orden social, manifiestan la necesidad de crear y utilizar instancias de poder para ser vanguardias (abiertas o encubiertas) de lxs oprimidxs (como el FER, Andha Chile y la ACES) y aspiran a controlar un Estado proletario o gobierno popular cuya experiencia histórica ha comprobado ser totalmente contrarrevolucionario y autoritario en la práctica (como terminó ocurriendo en Rusia, Cuba, China, Vietnam, y donde quiera que los leninistas de diverso tipo ocupan puestos de Poder)… Nuestra insurrección es para destruir al Poder, la de ellos, para hacerse del Poder.

Además, queda también diferenciarnos de ciertas orgánicas libertarias que reproducen discursos y prácticas leninistas como la reivindicación de demandas parciales, las plataformas, las siglas y las vanguardias encubiertas.

Finalmente, a nivel más global, sentimos la necesidad de marcar nuestras claras diferencias con todo discurso y accionar que no tiene como objetivo permanente la destrucción de la autoridad. Por su contenido, sus proyecciones o falta de ellas, ciertas posturas, aunque algunas parezcan radicales en los hechos, no aspiran a la propagación de la lucha contra el Poder y, por lo tanto, son otra cosa distinta a la praxis anárquica, insurrecta y antiautoritaria.
…Por eso tenemos claro (como alguien escribió por ahí) que somos una orgullosa minoría dentro de la minoría.

Sin embargo, aspiramos a contagiar a otrxs con nuestras ideas, no para hacer hegemonía o controlar las luchas, no para formar ejércitos populares ni apelar a una clase social supuestamente destinada a hacer la revolución. Aspiramos a la propagación y profundización de la lucha antiautoritaria simplemente porque nos interesa que otrxs individuxs también nieguen esta realidad de dominación y experimenten la libertad y la anarquía en el combate multiforme y cotidiano. Por eso apelamos a las conciencias individuales y a las vivencias comunes que permiten agudizar el conflicto y darle continuidad a la lucha contra el Poder. No nos interesa levantar programas pero sí tenemos proyecciones; nos negamos a hacer de la organización un fin en sí mismo, pero sí la utilizamos como herramienta para actuar; nos negamos a militar en organizaciones formales que dividen la lucha en etapas, solo aspiran a reclutar nuevos adeptos y tienen respuestas estructucturadas por su ideología. Sin embargo, sí tenemos una propuesta, y esta es la proliferación de los grupos de individuxs organizadxs por medio de la afinidad capaces de generar actividades antiautoritarias de diverso tipo y capaces de conectarse y coordinarse con otrxs a través de la informalidad… Y en el seno de esta propuesta organizativa se materializa en la práctica la forma de vida que proponemos: una vida libre, donde lxs individuxs libremente asociadxs den rienda suelta a su autonomía en apoyo mutuo con sus afines y en conflicto permanente con toda forma de Poder. En eso creemos, y por eso luchamos, desarrollando formas antiautoritarias de relacionarnos y aniquilando las relaciones de dominación y dependencia, porque nuestro modo de organizarnos refleja el modo en que queremos vivir, sin líderes ni representantes… Por eso nos negamos a separar la lucha de nuestra propia vida…

3) La importancia de conocer la represión para no frenar la lucha.

Por supuesto que el enemigo desea vernos derrotadxs, enajenadxs, aisladxs, encerradxs, paranoicxs, etc. Pero conocer cómo funciona la represión y cómo esta ha operado en contextos pasados y recientes nos ayuda a entender lo que pasa a nuestro alrededor y en cierta medida a anticiparnos a posibles golpes represivos. Es sabido que en fechas emblemáticas como el 29 de Marzo o el 11 de Septiembre los agentes del Poder suelen realizar seguimientos especiales o apuntan su vigilancia a ciertos espacios y compañerxs conocidxs por su postura de vida anárquica. Incluso pueden haber allanamientos o amenazas de éstos para intentar mostrar que está todo controlado o simplemente para atemorizar a lxs revoltosxs. Por ejemplo, a fines de 2009 en vísperas de las elecciones presidenciales fueron allanadas varias casas okupas y centros sociales autónomos, tal como ocurre a menudo en Grecia en vísperas de algunas fechas importantes.
Por eso llamamos a quienes se sienten parte de la lucha anárquica/antiautoritaria a permanecer atentxs y cuidadosxs sin nunca bajar los brazos ni caer presxs del miedo, manteniendonos activxs en todo momento y lugar.

¡¡¡Por lxs combatientes de ayer y hoy. Que este 29 de Marzo la insurrección y la anarquía salgan a las calles!!!

Sin Banderas Ni Fronteras,

Núcleo de agitación antiautoritaria

Sinbanderas.nifronteras@riseup.net

CHILE: EN MEMORIA DE LA GUERRILLERA URBANA ANTICAPITALISTA. A 23 AÑOS DEL ASESINATO DE LA JOVEN COMBATIENTE NORMA VERGARA

(Recibido al mail)

Norma-Vergara-Cáceres

A 23 años del asesinato de la joven combatiente Norma Vergara reivindicamos la memoria insurrecta desde la lucha contra toda forma de poder y autoridad.

Compartimos palabras de sus compañerxs escritas hace ya algunos años atrás dando a conocer su vida, su historia, y sus opciones por dar continuidad a la guerrilla urbana anti-capitalista en Chile en el contexto de reacomodo democrático tras el fin de la dictadura (1990).

NORMA VERGARA CÁCERES

En la tarde del 26 de marzo de 1993 la Dirección de inteligencia policial de carabineros (DIPOLCAR) llevó a efecto en el centro de santiago una operación de aniquilamiento en contra de una escuadra de las Fuerzas Rebeldes y Populares Lautaro (FRPL), que estaba reunida en un restorán en las inmediaciones de san diego con Victoria y que había sido detectada como resultado de una intensa labor represiva en torno a todas las estructuras integrantes el MAPU- Lautaro, organización que en ese entonces desarrollaba una continua actividad político-militar de resistencia anticapitalista; en dicha acción cobarde y mientras se subía a un automóvil junto a dos compañeros que con posterioridad fueron detenidos fue ultimada Norma Vergara Cáceres a consecuencia de un impacto de bala en su pecho disparado a distancia y sorpresivamente por un tirador escogido negándole así la posibilidad de responder en un acto de legítima defensa.

Norma era una joven y linda mujer e mirada intensa a quien con justeza llamamos «ojitos de luna». De origen campesino, al momento de su asesinato, recién había cumplido los 27 años de edad. Ella llegó a Santiago a la población Santa Adriana siendo una niña, junto a su numerosa familia, inmediatamente después del 11 de septiembre de 1973 y como resultado de la detención de su padre quien era dirigente sindical en la zona de El Monte-Melipilla y miembro del MAPU Obrero Campesino.

Desde pequeña, integró grupos folclóricos que tenían por finalidad difundir la cultura campesina con un sentido de clase para articular la resistencia a la dictadura.

Ya en los ’80 comenzó a participar activamente en los centros juveniles de la zona sur de Santiago que eran espacios de reunión de la juventud popular combativa que alimentó con energía y decisión la lucha cotidiana por algo más que el fin del fascismo pinochetista. Con el correr de los años ingresó al Movimiento Juvenil Lautaro cuando esta organización de izquierda Guevarista interpretaba de manera creciente una forma novedosa de inserción político social en poblaciones, liceos y universidades que atraía a quienes soñaban con un «Chile Popular».

Los ya conocidos pactos de la Concertación con los milicos provocaron el reacomodo burgués para una mejor administración del capitalismo neoliberal y es así como con la farsa de la alegría que venía lograron la neutralización del amplio movimiento social y popular que se había tomado las calles y lo condijeron dentro de la legalidad fascista para forzar la salida de Pinochet a través de la participación electoral. Fue en este marco que «la chiquitita» como también la era llamada por sus compañeros reafirmó su decisión de combatir con todo esta maniobra de dominación sabiendo que en esta opción los desafíos eran mayores y los riesgos también.

A fines de 1990, mientras participaba en la recuperación y repartición de un camión de alimentos cerca de su población repele a balazos la acción represiva de carabineros, dando cuenta de un arrojo combativo que entre otras cosas hizo posible su integración a las escuadras de las FRPL; y desde comienzos d 1991 hasta el día de su caída desempeñó importantes labores de organización, planificación y concretización del quehacer cotidiano de guerrilla urbana cuestión que la hizo adentrarse en la inevitable circunstancia de la vida clandestina. Su entrega en la lucha revolucionaria la llevó a convertirse en un objetivo de especial atención para la maquinaria asesina del estado policial y en momentos en que participaba de la jefatura de las FRPL su punto de concentración era el rescate desde la ex Penitenciaría de Santiago de casi todos los prisioneros políticos para los cuales se estaba construyendo una cárcel de alta seguridad inédita en Chile por su dureza y que suponía un aislamiento total e inhumano junto a largas condenas que ella estaba dispuesta a evitar con todo lo que hacía, tenía y podía.

Han transcurrido 10 años desde que los pacos, con su muerte física quisieron eliminar cualquier vestigio de su presencia pero una vez más se equivocaron ya que no hicieron más que sembrar con su sangre semillas de insurrección que rebrotan como rabia organizada como muchas mujeres que se levantan nuevamente fuera de toda legalidad para empuñar bombas de odio contra el capital y es así que su presencia nos acompaña en el día a día de resistencia a la cárcel y nos alimenta de los nuevos esfuerzos concretos de construcción social popular y por ello hoy quienes fuimos sus compañeros y algo más así como quienes no la conocimos físicamente pero sí compartimos el legado de una mujer que empuñó las armas lejos de toda palabrería para decir con su ejemplo y con su práctica lo mismo que con fuerza hoy venimos a gritar… «Hasta más no poder luchar, luchar y luchar para hacer y ver la revolución social avanzar, crecer y perdurar».

Desde núcleos y colectivos en la pobla, en la universidad, en la cárcel; desde espacios reales que a paso lento pero seguro multiplican la subversión con horizontalidad, autonomía, autogestión y dignidad, decimos que no somos uno sino que muchos los que reivindicamos con la misma fuerza de tu acción y con la eterna alegría de tu mirada «chica ojitos de luna».

«Por los de ayer, por los de hoy, por los que vendrán…..»

¡JUVENTUD KOMBATIENTE: INSURREXION PERMANENTE…

NORMA VERGARA PRESENTE!

COLECTIVO DE ACCION NORMA VERGARA

KOLEKTIVO KAMINA LIBRE DE PRISIONEROS POLITICOS,

k.a.s. stgo. Chile

Marzo 2003.

ESPAÑA: DESMONTANDO EL ANDAMIO. ALGUNAS REFLEXIONES PERSONALES TRAS EL JUICIO CONTRA MÓNICA Y FRANCISCO

(Enviado al mail por La Rebelión de las Palabras)

Estos días, muchxs compañerxs llegadxs de distintos puntos del Estado español nos dimos cita en Madrid con el objetivo de mostrar nuestra solidaridad y acompañar a lxs compas Mónica y Francisco en su juicio en la Audiencia Nacional. Un buen grupo se concentró en el exterior del edificio, gritando consignas que lograron traspasar los muros y abrazar a Mónica y Francisco, cuya actitud digna, firme y consecuente durante el juicio fue también para muchxs de nosotrxs un empujón, un aliento, un motivo más para sentirnos cómplices y decididxs a seguir adelante, sean cuales sean las artimañas que el enemigo pueda hurdir para encerrarnos. Mientras, otrxs tantxs pudieron entrar a la sala. Para enterarse mejor de los pormenores de cada una de las sesiones, os recomiendo mucho la lectura de los 3 resúmenes que fueron publicados por otrxs compañerxs en el Indymedia Barcelona (podéis acceder clickando a continuación en el enlace correspondiente: primera sesión, segunda sesión, tercera sesión). El objetivo de este escrito no es tanto relatar los hechos sino intentar leerlos, compartir reflexiones del durante y del después, con el fin de intentar acercar un poco más la situación a compañerxs de otros territorios del planeta o del propio Estado español pero que por las razones que fuesen no pudieron desplazarse a Madrid.

“No importa lo que ocurra, porque lo jodido es que la sentencia ya estaba escrita antes del juicio, pero como siempre la democracia necesita un paripé que legitime su represión.”

Así hablaba una compañera mientras debatíamos tras el juicio sobre cuáles eran nuestras conclusiones globales, y acerca de cuáles podrían ser los posibles resultados para el proceso. No le falta razón, y aunque podría matizarse y completarse hasta el infinito, esa afirmación suya aunque simple refleja bastante bien un sentimiento que comparto. Y es que el juicio contra Mónica y Francisco no fue más que un teatro, una obra representada sobre los escenarios mediáticos y judiciales en los que el sistema legitima y valida socialmente todas sus cadenas, donde los candados y las sogas que encierran y estrangulan a sus adversarixs toman la forma de ficheros, y de declaraciones y pruebas tan falsas como la máscara de presunta imparcialidad y objetividad tras la cual una jueza cobarde y prepotente se ríe de nosotrxs.

Dicen por ahí que la Justicia (así, en mayúscula, como una institución suprema de criterio absoluto) es objetiva, que es ciega, que es (o debería ser) imparcial. No obstante, quienes llevamos un tiempo en este lado de las cosas sabemos muy bien que todos esos mitos sólo convencen al ciudadano medio, feligrés ad-hoc de la religión democrática.

En lo que a nosotrxs respecta, el juicio cumplió (y quizá superó) nuestras expectativas. Ni el tan hilarante como irrisorio despliegue de “pruebas” presentadas por la fiscal y por lxs distintxs peritos policiales, ni la constante y descarada tentativa por parte de la jueza de entorpecer/silenciar/obstaculizar las declaraciones de la defensa (especialmente aquellas menos convenientes para su andamiaje represivo, dado que desarticulaban las falacias que lo apuntalan) nos sorprendieron, aunque sí hicieron aflorar una vez más la ira y la impotencia, sentimientos a los que estamos tristemente acostumbradxs.

Ni huellas dactilares ni ADN de lxs compañerxs fueron encontradxs ni en los restos del explosivo detonado en la Basílica del Pilar de Zaragoza ni en la cabina telefónica usada para hacer la llamada que dio el aviso de bomba; Los supuestos vídeos de seguridad, aunque según fiscal y peritos policiales mostrarían a personas con “la vestimenta y la forma de andar” (¿?) de Mónica y Francisco, carecen de la calidad mínima estipulada (en cuanto a cantidad de píxeles y definición de las imágenes) para servir como prueba, y además los análisis antropométricos se realizaron en relación a imágenes recogidas aleatoriamente de Internet (tal y como los propios peritos policiales reconocieron en sus declaraciones) sin poder estar seguros de si esas fotografías habían sido modificadas o alteradas mediante programas y aplicaciones de montaje fotográfico, y esto por no hablar de que no hay una sola de las imágenes de cámaras de Zaragoza donde se vea a lxs compañerxs o a alguien que se les parezca, limitándose todo a imágenes del Metro de Barcelona, ciudad donde ellxs residían; No hubo rastro alguno de los presuntos “boletines internos” de los GAC que lxs compañerxs poseerían, ni tampoco ningún documento que certificase los supuestos “hallazgos” de los maderos, como las “notas sospechosas” en “cuadernos de tapa negra” o los supuestos “manuscritos”; Las mentiras pronunciadas por la acusación en la sala cuando dijeron que Mónica y Francisco habían sido condenadxs por terrorismo en Chile (dentro de la Operación Salamandra/Caso Bombas) y que su absolución se habría debido a un “error procesal” (¿?) son directamente falsas; Además, los 4 testigos que presentó la defensa confirmaron las declaraciones que en su momento dieron a la policía, en las cuales ninguna de las características que describieron de lxs individuxs que les llamaron la atención (edad, aspecto, acento del habla…) se corresponden con las de Mónica y Francisco, y esto por no hablar de que, a pesar de que mantiene las acusaciones por estragos y lesiones y continúa solicitando una condena de varios años de cárcel (si bien de 12 años y medio, mucho menor que la petición de 44 años que solicitó la fiscalía) y una indemnización de más de 100.000 euros, el abogado de la mujer que dijo haber sufrido daño en un oído a causa de la explosión del artefacto por cuya colocación se acusa a Mónica y Francisco retiró la acusación por terrorismo, reconociendo pese a ser parte de la acusación que no existen pruebas reales que confirmen que la FAI/FRI es una organización terrorista (dado que desde 2009, de hecho, no figura como tal en la Disposición Europea, dato que, por cierto, los “profesionales” peritos policiales desconocían cuando intentaron sostener sus argumentos apuntando que en la disposición de 2001 sí aparecía). En fin, ni una sola prueba consistente más allá de las declaraciones de testigos de la fiscal (que casualmente, son TODXS policías) basadas exclusivamente en innumerables imprecisiones y pruebas inválidas que la defensa, afortunadamente, pudo ir refutando y desmontando una por una, para escarnio de la jueza y sus compinches.

Podría ponerme a desmenuzar todas las especulaciones y fantasías de película yanki de acción que una de las peritos policiales que declaró para la acusación soltó en torno a la supuesta vinculación de Mónica y Francisco con los GAC y a la supuesta conexión de éstos con la Federación Anarquista Informal. No obstante, además de que debo reconocer que me da bastante pereza, me interesa centrarme aquí en un aspecto particular de esto, en concreto en la persistente tentativa del Estado por criminalizar y convertir en prueba judicial los lazos de afinidad y solidaridad que unen a lxs compañerxs más allá de las fronteras y las distancias. Durante esa parte del juicio, correspondiente a la segunda sesión, hechos como la contribución de Mónica al libro “Mapeando el fuego” (editado en distintos territorios e idiomas y que contiene palabras de diversxs compañerxs anarquistas presxs alrededor del mundo en solidaridad con lxs presxs anarquistas de la Conspiración de Células del Fuego en Grecia), o como los saludos solidarios que anarquistas presxs de otras partes del planeta enviaron en su día a Mónica y Francisco (se mencionaron el llamamiento al Diciembre Negro de los compas Panagiotis Argyrou y Nikos Romanós desde Grecia y un comunicado reivindicativo de una acción de sabotaje realizada en Barcelona en el marco de esta misma campaña, por ejemplo) se convirtieron por arte de magia en “evidencias” de la presunta “pertenencia” de Mónica y Francisco a FAI/FRI (como siempre, partiendo de la base de que la FAI/FRI posee algún tipo de estructura formal/fija, con determinados “liderazgos” y roles marcados, lo cual simplemente es falso) y por tanto en elementos importantes para la aplicación de sentencias condenatorias. No entiendo (ni me importa) en qué medida una persona es responsable de que otrxs le envíen saludos o le dediquen sus acciones, pero sí es fácil dilucidar y resolver las intenciones que tal ejercicio de criminalización trae consigo. Lo que se busca y pretende es silenciar y ahogar cualquier grito que cruce las fronteras, que vuele sobre los muros que esta sociedad enferma levanta compulsivamente a nuestro alrededor, y supere las barreras que imponen las élites para acariciar el rostro de quienes permanecen bajo llave, en otro punto geográfico, en otro momento, pero bajo las mismas reglas demenciales. Es importante incidir sobre ésto, pues casos anteriores de estructura y desarrollo similares a los de la Operación Columna y a los de este juicio derivado de la misma nos indican que la solidaridad se paga cara, y que incluso cuando son unas simples palabras de afecto, sin más vínculo que el cariño que, al saber de sus palabras y hechos consecuentes, nos despiertan determinadas personas enjauladas o no, el atrevimiento de saludar a aquellxs a quienes el Poder quiere ver aislados, solos y acorralados, tiene consecuencias. Igual de destacables son los intentos (una vez más) por parte de algunxs peritos policiales, y de la jueza y la fiscal, de presentar el apoyo mutuo y la solidaridad como prácticas exclusivas de la FAI/FRI (¿?), como si la solidaridad y el apoyo que distintxs presxs anarquistas (al margen de si fueron o no encarceladxs por acciones reivindicadas en su momento bajo estas siglas) se han mostrado entre sí fuesen factores determinantes a la hora de afirmar la pertenencia de dichas personas a esa organización. Por esa regla de tres, ¿todas las personas que alguna vez hemos escrito una carta a compañerxs presxs, o que hemos participado en concentraciones y manifestaciones de apoyo, o que hemos repartido panfletos y pegado carteles informativos, o que hemos difundido o solidarizado de cualquier manera con anarquistas prisionerxs, podríamos ser propensas a ser señaladas como supuestas miembros de esta organización? Cualquiera que se haya documentado mínimamente sobre los aspectos más básicos y superficiales de la teoría y práctica anarquistas sabe perfectamente que la solidaridad y el apoyo mutuo son valores y actitudes propios de toda persona que se diga anarquista, ya que, con sus muchos matices y diferencias según el criterio de la persona a la que preguntes (no todxs entendemos la solidaridad o el apoyo mutuo del mismo modo, aunque compartamos una base de mínimos común), ambos fortalecen la negación de este mundo, y plantean la cooperación y la relación entre iguales como oposición a un mundo basado en la competitividad, el canibalismo social y el aislamiento, donde se nos empuja continuamente a entregarnos a una malograda cultura del capricho irracional sin prestar atención a las consecuencias que nuestros actos tienen para otrxs, ni a las opresiones a las cuales estamos contribuyendo con ellos. La criminalización y los esfuerzos renovados por hacer de la solidaridad y del apoyo mutuo elementos de sospecha no son casuales y responden a la desesperación de los represores por aislar toda práctica no recuperable y no asimilable por su sistema. Sigue leyendo ESPAÑA: DESMONTANDO EL ANDAMIO. ALGUNAS REFLEXIONES PERSONALES TRAS EL JUICIO CONTRA MÓNICA Y FRANCISCO

PALABRAS/SALUDOS DE CONSPIRACIÓN DE CÉLULAS DEL FUEGO – CÉLULA DE VIOLENCIA METROPOLITANA PARA UNA ACTIVIDAD EN CHILE

ccflogo

[Traducido por Sin Banderas Ni Fronteras]

[Lo siguiente es un saludo de lxs compañerxs de la Conspiración de Células del Fuego-Célula de Violencia Metropolitana para la actividad realizada el sábado 12 de marzo en la Biblioteca Antiautoritaria «Las Lecheros», donde se exhibió el video del Proyecto Fénix* y se presentó el libro «Nuestro día llegará»**.]

Con toda nuestra mirada vuelta hacia el otro lado del mundo, enviamos estas palabras para expresar la afinidad que sentimos con todxs lxs hermanos y hermanas  presentes en esta actividad. Enviamos nuestro más cálido saludo a todxs lxs compañerxs que están organizando la actividad y la presentación del video «Proyecto Fénix» y del libro «Nuestro Día Llegará».

El Proyecto Fénix es la parte más vital de la International Negra de lxs anarquistas de acción en tanto ha sido cruce de caminos en el cual compañerxs de diferentes ángulos del planeta se han encontrado con el deseo común de dar vida internacionalmente a una coordinación informal de acción anarquista.

La mecha del Proyecto Fénix fue detonada por la Conspiración de Células del Fuego/ Celula Sole-Baleno que hizo explotar el coche personal del la directora de la prisión de Koridalos en Grecia, acción que fue el regreso oficial de CCF a las trincheras del ataque anarquista. Posteriormente, muchxs compañerxs en todo mundo respondieron a esta invitación por una coordinación informal de ataques. Hemos visto los fuegos de la insurgencia anarquista iluminarse en Indonesia, en Rusia, en Chile, en Alemania, y de vuelta a Grecia y estos humos han llegado hasta las celdas de lxs miembrxs de la Conspiración de Células del Fuego que firmaron todxs juntxs un texto común saludando la acción de la Célula Sole-Beleno.

Ese texto fue un mensaje de que la Conspiración no se rinde jamás sino que vive a través de cada ataque subversivo contra del sistema existente. Y también ese texto fue la razón para nuevas acusaciones judiciales contra lxs miembrxs de la CCF por instigar acciones del Proyecto Fénix. Esto demuestra que el Poder le teme a lxs anarquistas que no se doblegan ni en cautiverio.

A través de este video, ustedes se encontrarán con lxs miembrxs encarceladxs de CCF ya que son nuestras propias voces las que están en el video, logrando así una especie de fuga. Por otra parte, a través del libro «Nuestro día llegará» se desenvuelve la historia de un plan de escapa que finalmente nunca ocurrió. A partir de ese relato es fácil apreciar que la angustia imparable por libertad y la acción anarquista no puede ser amordazada ni capturada. Y es por eso que la autoridad es implacable con aquellxs que reivindican ellxs mismxs, en sus propios términos, la salvaje libertad de la ilegalidad. Y esto quedó demostrado con las detenciones de lxs parientes de lxs miembrxs de CCF, quienes después de ser denostadxs por la prensa, fueron detenidxs y se necesitaron dos huelgas de hambre para excarcelarlxs pero con condiciones que que constituyen un exilio porque ni siquiera pueden visitar a sus seres queridos en prisión. Por estos días, ellxs están en juicio pero no se les permite siquiera estar presentes en la corte.

Para nosotrxs es un hecho que la auténtica afinidad anarquista sobrepasa la dicotomía de legalidad – ilegalidad y en consecuencia ésta siempre va a encontrar maneras de acercar a lxs compañerxs. Así que sentimos que estamos entre ustedes compartiendo la misma complicidad en la conspiración de la imparable insurrección anarquista internacional. Una complicidad que compartimos aquí en territorio griego con un montón de compañeros y compañeras con quienes, basadxs en las propuestas principales del Diciembre Negro, nos estamos encontrando unxs a otrxs a través de la conexión Insurreccional entre teoría y acción.

Y así, el Diciembre negro da lugar a un proceso anarquista viviente, una plataforma de coordinación que promueve la autonomía y la diversidad de la acción anarquista y que trata de superar las fronteras nacionales para encontrarse con otrxs indivividuxs y colectividades anarquistas en todas partes del mundo.

Nosotros participamos en este esfuerzo porque amamos los desafíos.
Desde Grecia hasta Chile…..

Conspiración de Células del Fuego-Célula de Violencia Metropolitana.

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* Video Proyecto Fénix en español: https://vimeo.com/125059680

** Libro  «Nuestro días llegará»: https://publicacionrefractario.wordpress.com/2016/02/19/version-digital-de-libro-nuestro-dia-llegara-ante-el-juicio-por-el-intento-de-fuga-de-ccf/